Por Anibelca Rosario
En República Dominicana desde los tiempos de “cuca y roquetan”, el acceso a los 500 kilómetros de playas del país, al igual que a ríos, lagunas, montañas y demás santuarios naturales, ha sido para todos los criollos y extranjeros.

Desde tiempos de Cuca y Roquetan esta disposición constitucional también ha sido violada.

Los ejemplos sobran, Bayahibe, Punta Cana, Juan Dolio, Playa Dorada, entre otros, donde, para una persona que no este hospedada en algunos de los hoteles de playa, bañarse en ellas deberá tener determinación, la ropa de pelea y no temer ir a la cárcel acusado de invadir la propiedad privada.


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No tenemos derecho al uso libre de las playas, donde legisladores, funcionarios, opositores y empresarios, tengan tierras o algún interés inmobiliario, tampoco a una administración pública honesta, al disfrute de los bienes de dominio público, a la paz, al desarrollo, a la promoción y conservación de los conocimientos tradicionales, al uso de los avances de las ciencias y la tecnología, al acceso y libre expresión en el ciberespacio, del medio ambiente, a los recursos naturales y a la conservación del equilibrio ecológico, de la biodiversidad nacional y los recursos fitogenéticos.

Tampoco tendremos derecho a la preservación del patrimonio cultural y de los valores estéticos, históricos, urbanísticos, artísticos, arquitectónicos, arqueológicos y paisajísticos nacionales, al adecuado funcionamiento de las fuerzas del mercado y la competencia leal y los intereses y derechos del consumidor y del usuario de bienes y servicios públicos, también fueron eliminados.

Con anterioridad, los legisladores decidieron que un/a medico/a no pueda decidir, valga la redundancia, salvar la vida de una embarazada riesgosa.

Y en los próximos días también constitucionalizaran que el ministerio público no sea independiente, que la cámara de cuentas siga siendo propuesta por el Poder Ejecutivo.

Mientras tanto, 25 asambleístas usaron su cabeza y dijeron NO a que mi derecho a bañarme en cueros o con ropa en un balneario lo decida un empresario, opositor o gobiernista con intereses marinos, son ellos por el PLD, Juana Mercedes Vicente, Isabel Bonilla, Noé Camacho, Alfonso Castillo, Félix Castillo, Ysabel de la Cruz, Minou Tavárez, Alfonso Crisóstomo Vásquez, Yuderka de la Rosa, Juan Encarnación, Pedro Dionicio Flores, Milciades Fanjul, Angel José Gomera, Domingo Páez, María Altagracia Matos, Félix Nova, Inocencio Colon, Carlos Manuel Peña, Juan Carlos Quiñones, Juan Serulle y Pelegrin Castillo de la FNP.

Por el PRD, tuvieron el coraje y dijeron NO Luis Ramón Peña, Antonio de León Morel y Chu Vásquez, mientras por el PRSC hizo lo propio, Rafael Molina Lluberes.

Los pasos hacia atrás con esta reforma son infinitos.

El panorama es desalentador, las opciones no son muchas…pero usted ciudadana/o puede empezar a provocar cambios, el 16 de mayo próximo es un buen momento.